Crónica de la salida al delta de l´Ebre 22 de septiembre 2018
Salida del Grupo Local coincidiendo con la celebración del Delta Birding Festival
A las 6,15h. l@s doce asistentes a esta excursión ya estábamos reunid@s en Palau Reial, así que, sin mayor demora, subimos a los tres coches y salimos hacia el sur. Tras la parada del desayuno en el área de servicio de Hospitalet de l´Infant, entramos en el Delta de l´Ebre por l´Ampolla a las 8,30h y tiramos directos hasta la finca DACSA. Antes de llegar ya identificamos, como mínimo, diecinueve especies de aves, a destacar la abundancia de morito común y la presencia de garcilla cangrejera y fumarel cariblanco, remoloneando antes de partir hacia África. Sobre las 9,20h. llegamos a la finca DACSA que no estuvo nada generosa; mucho chorlitejo grande, algunos chorlitejos chicos, un martín pescador común, lavanderas boyeras, un par de andarríos chicos, un busardo ratonero en lontananza y las gaviotas habituales.
Visitamos la finca DACSA, los espacios visibles de l’illa de Buda y l’Alfacada desde la torre de Migjorn, salinas de Sant Antoni, Riet Vell desde el observatorio Swarovski y la bahía del Fangar.
Más entretuvo la prospección desde la torre de Migjorn ya que, desde allí, prospectando la Illa de Buda y l´Alfacada, añadimos once especies de aves al listado de la jornada entre las que cabe citar la primera águila pescadora de hoy, espátulas comunes, ánade rabudo (tempranero), porrón europeo, archibebe oscuro, avoceta común y aguja colipinta.
Pasando por la carreterilla de Casa Cusa, hacia la playa del Serrallo, paramos para contemplar un andarríos bastardo que estaba de paso en unos arrozales segados.
El siguiente punto de prospección fueron las salinas de Sant Antoni que nos regalaron la vista con algunos charrancitos comunes, varias pagazas piquirrojas, un bando de charranes patinegros, gaviotas picofinas, gaviotas de Audouin, una aguja colinegra y, cuando ya íbamos a subir a los coches, un zarapito trinador que se paseó tan pancho a diez metros de nosotr@s.
Ya bien peinadas las salinas de Sant Antoni, pusimos rumbo a Riet vell para comer en las mesas de picnic junto a la barraca y, a continuación, visitar el observatorio Swarovski. Aunque, pocas horas antes, un globo aerostático turístico había espantado a casi todas las aves del lugar, un rascón europeo tuvo a bien mostrarse cerquita, cosa que no sucede cada día…
Allí mismo, en un extremo del observatorio, aprovechamos para hacer la foto de grupo.
Desde Riet Vell fuimos a Sant Jaume d´Enveja donde, a la sombra en la terraza de un bar, era oportuno dejar pasar un rato de calorina (erran las 15,30h.) tomando café, refrescos y/o helados, según la idiosincrasia de cada cual.
Como siempre, reservamos para la tarde la visita del último enclave interesante de la salida, la Bahía del Fangar. Aunque en esta ocasión, a diferencia de lo que sucedió en la salida del pasado 8 de septiembre, los niveles de agua eran adecuados, tampoco abundaban las limícolas, a saber porqué. Menos mal que los vuelvepiedras comunes del Goleró estaban allí “de guardia” para alegrarnos la vista con su confianzuda presencia.
Y, siguiendo la carretera hacia el este, sacamos un Zarapito real. Después, en la carretera del oeste, estuvimos un rato parad@s observando las idas y venidas de hasta tres águilas pescadoras, una de las cuales adorna la foto de cabecera de este reportaje. También allí se dejaron ver bien las gaviotas picofinas.
Finalmente, antes de entrar en l´Ampolla, hicimos un último alto para despedirnos tod@s de tod@s.
A nivel ornitológico, la jornada no puede calificarse de extraordinaria pero sí de agradecida, como lo suele ser a menudo el Delta de l´Ebre en cualquier época del año, más aun cuando, como hoy, el clima acompaña y la compañía es grata.