Nueva experiencia en el Grupo Local: charlas para niños

Tener amigos que se dedican a profesiones de lo más diverso, a veces puede resultar un compromiso. Tener una amiga que es maestra de primaria, nos puso a Javier y a mí en el compromiso de tener que preparar una charla-presentación sobre las aves dirigida a niños de entre siete y ocho años, pero consideramos que el reto merecía la pena y nos pusimos manos a la obra, aunque a los dos nos queda ya muy lejano el tiempo en que nuestros respectivos hijos tenían esa edad para tener “fresco” el lenguaje apropiado y los conocimientos de base que podían tener los destinatarios.

Teníamos dos semanas escasas para estrujarnos los sesos, y ponernos rápidamente manos a la obra, y al ordenador. Una vez preparado el guión, nos pareció buena idea contactar con nuestra compañera Gloria Rodríguez para que nos prestara el material que ella recolecta en sus expediciones por Palau de Plegamans (plumas, nidos, huellas, egagrópilas, etc.) y con la Delegación de SEO Birdlife para que nos facilitara revistas con las que poder obsequiar a los alumnos.

Finalmente, dentro de los plazos previstos, el pasado viernes día 12 de febrero expusimos el trabajo, no sin cierto nerviosismo por la novedad,  ante un público de 23 alumnos y alumnas, su maestra y una estudiante en prácticas, del curso 2º B, Classe dels Tafaners, en l’Escola Turó de Can Mates de Sant Cugat del Vallès.

La verdad es que los niños estuvieron atentos y participativos, tanto que lo que en principio estaba previsto que tuviera una duración de unos 35-40 minutos se alargó a una hora, tras la cual se pasó a la “manipulación” del material proporcionado por Gloria que, después de la charla teórica fue la culminación práctica de la jornada.

El reparto de las revistas y de unos pines de aves que habíamos llevado para cada uno de ellos fue un perfecto “fin de fiesta”.

En total compartimos más de una hora y media con un público entusiasta, entregado y que dio muestras de conocer muchas de las aves que les presentamos e interés en las que no reconocían. Gracias a las preguntas que fueron haciendo a lo largo de la charla, nos dieron la información necesaria para poder completar y corregir el trabajo que habíamos preparado para que, en caso de que surja alguna otra oportunidad, podamos dar a conocer e introducir a otros niños y niñas a ese mundo todavía minoritario de la ornitología.

La sorpresa la tuvimos unos días después cuando, una vez tratado en clase el tema que les habíamos expuesto, nos hicieron llegar los trabajos de todos y cada uno de los niños, con una nota de agradecimiento y una foto de la clase al completo. Eso nos hizo sentir la satisfacción del deber cumplido.