Salida del Grupo Local al delta de L’Ebre 5 de septiembre 2015

Cuando se propuso esta salida en la reunión destinada a decidir las actividades que ofrecería el Grupo Local durante la segunda mitad del año, se pensó que habría poca gente en esa época, todavía vacacional. Por ello resultó sorprendente la cantidad de personas que se apuntaron. Aunque un par de ellas se dieron de baja a última hora, al final fuimos nada menos que catorce (cuatro vehículos).
Tras una parada para desayunar, cerca de Hospitalet de l´Infant, entramos al Delta de l´ Ebre por l´Ampolla a eso de las 8:50. El madrugón sirvió para iniciar pronto nuestro recorrido y pillar a tiempo un bando de diecisiete Abejeros europeos y un Gavilán común que nos sobrevolaron entre general regocijo. A las 9:30. llegamos a la finca DACSA (o Evergreen) un punto clave para las aves migratorias que, en primavera y finales de verano, es todo un filón ornitológico; no en vano, solo allí, contamos al menos treinta y cuatro especies. Entre mucho chorlitejo grande, combatiente y avefría europea se pudieron ver bichos menos habituales, como terrera común, canastera común, zarapito trinador, aguja colinegra o chorlito dorado europeo. Fallamos en la búsqueda de un correlimos culiblanco que había aparecido por allí dos días atrás pero fue suficiente consuelo la larga contemplación de la estrella de la salida; su señoría el chorlito carambolo. Para más de un@, esta fue la primera vez que se lo topaban.

El repaso a la DACSA fue concienzudo, pues duró dos horas y cuarenta y cinco minutos. Pero a fe mía que valió la pena. Desde allí pusimos rumbo a nuestra siguiente parada; las Salinas de Sant Antoni. El lugar es una conocida zona de descanso de la escasa pagaza piquirroja – que no faltó a la cita – y también pudimos ver algunos charrancitos comunes, todavía remoloneando antes de volar hacía el sur. Desde allí rodamos a la cercana finca de Riet Vell, orgulloso bastión del largo proyecto de SEO/BirdLife para demostrar la viabilidad del arroz ecológico, proyecto exitoso que ha recibido varios premios, incluso a nivel europeo. En el interior del observatorio de su laguna, una de las pocas sombras tranquilas disponibles en kilómetros a la redonda, dimos cuenta de muestra pitanza de mediodía. Luego fuimos ha hacer el café de sobremesa a Deltebre. Se trataba de dejar pasar la hora más tórrida charlando animadamente.

El último punto de prospección fueron las orillas de El Goleró (Bahía del Fangar); el agua estaba muy alta y había inundado todos los bancos de arena donde gustan de estar las limícolas pero, hacia el extremo occidental de la orilla, dimos con un buen grupete que permitió estupendas vistas, a telescopio, de no pocas aves comunes (archibebe claro, archibebe común, correlimos común, gaviota picofina…) y una que no lo es tanto; aguja colipinta. Esa limícola puso el remate a la salida; en el parquing de la Bassa de las Olles nos despedimos tod@s de tod@s, un proceso largo debido a la variedad de permutaciones y, sobre las 18:25, iniciamos el regreso a Barcelona.

Podemos concluir que la salida fue todo un éxito ya que su razón central era ver limícolas en esta época de migración y las veintidós especies identificadas han dado mucho de sí para su disfrute visual y estudio comparativo. Sin duda, como ya ha sucedido con salidas a otros interesantes enclaves de la geografía catalana (Secans de Lleida, Araós-Bonaigua…) habrá que convertir en tradición la del Delta de l´Ebre, dada la cuantiosa asistencia tanto de gente como de aves.

Lista de aves observadas

en verde las limícolas