Reportaje de la salida Araós Bonaigua 2024
Texto: Salva Solé
Tras desayunar en Tremp, a eso de las 11,00h, l@s catorce asistentes a esta excursión, empezamos la actividad en la riera de Rialp. Allí, por segunda vez en todos estos años, nos falló el mirlo acuático europeo que, si acaso, se dejó ver en fugaces y dudosas apariciones a los ojos de muy pocas personas. Pero, a pesar de la lluvia moderada e intermitente, encontramos otras especies de interés; pico picapinos, oropéndola europea, zarcero políglota…
Sobre las 13,30 h llegamos al albergue de Arestui y comemos de lo traíamos de casa en la sala principal.
Después declaramos tiempo libre para dejar pasar las primeras horas de la tarde al gusto de cada cual. En ese rato vimos volar un águila real, algún buitre leonado y algun@s divisaron el primer alcaudón dorsirrojo de la salida.
La previsión meteorológica anunciaba chubascos, pero a las 17,25h llegábamos al Bosc del Gerdar (Mata de Valencia) y paseábamos por esa joya botánica – un abetal natural – sacando bien pocas especies pero, entre ellas, el trepador azul y el agateador eurasiático. El reyezuelo listado se dejó oír pero no ver. Aunque llovió y lloviznó a ratos, valió la pena.
De regreso en el albergue, a las 21,00h empezábamos la siempre deliciosa cena que se sirve en este alojamiento. Como mañana debíamos madrugar, sobre las 22,20h nos pusimos a por dormir.
31-6-2024 (domingo)
A las 6,30h, tras contar gamos e incluso algún jabalí en la ladera de enfrente, empezábamos a despachar el desayuno y a las 7,30h nos poníamos en marcha.

El escribano montesino fue la única especie destacable de ese trayecto. Hicimos una parada en el puente de Araòs y allí vimos un lejano macho de lavandera cascadeña. Como siempre, la subida por el Bosc de Virós tuvo su primer paseo en las Bordes de Virós. Del puñado de especies que detectamos en esa zona cabría destacar el carbonero garrapinos, mosquitero papialbo y el zorzal charlo. Además, se oyó el chochín paleártico y el cuco común. Tras terminar allí, subimos al refugi del Gall Fer; tres corzos se nos cruzan en la pista. El verderón serrano (un bando de más de ocho ejemplares) ya nos esperaba allí pero el piquituerto común tardó casi 40 minutos en aparecer durante los cuales la pareja de avión roquero que nidifica en el alero del refugio nos estuvo dando pasadas muy cercanas.

Luego ponemos rumbo al norte y, por el camino, hubo quien divisó el alimoche común y el quebrantahuesos. Realizamos el primer paseo de la subida al Port de la Bonaigua en la zona de la Mare de Deu de les Ares. Las especies clave de este “escalón” alpino son – o eran… – el alcaudón dorsirrojo y el escribano cerillo; el primero cumplió – aunque muy de lejos – pero el otro no, tal como ya sucedió el año pasado.
En la siguiente parada, la del roquedal de más arriba, hacemos una moderada cosecha de aves montanas; collalba gris, chova piquirroja, acentor común y bisbita alpino. El roquero rojo apenas se insinuó y lo hizo de forma tan lejana y fugaz que no lo incluyo en el listado de aves vistas u oídas. Eso sí; como siempre aquí, difrutamos de la visión de varias marmotas.
Finalmente aparcamos junto al edificio de piedra que preside el Port del Bonaigua. Aunque nos cayó un chaparrón muy breve, pudimos comer allí y, cuando ya estabamos recogiendo, uno de esos zorros buscavidas que saben que donde hay gente hay comida, nos vino a visitar, sirviendo de broche a una salida generosa con los mamíferos ya que además, vimos gamos, corzos, un conejo, tres jabalís, una ardilla roja y la troupe de marmotas de la Bonaigua; ¡siete especies, nada menos!

Si mis cuentas son exactas, esta ha sido la décima excursión Araós-Bonaigua llevada a cabo por el Grupo Local (la primera data del 2012). La lluvia poco afectó al número y variedad de aves vistas pero, como suele suceder, siempre faltan especies que otras veces se vieron. En esta ocasión echamos de menos al el picamaderos negro, el roquero rojo, chova piquigualda, bisbita arbóreo y escribano cerillo. Pero también pudimos observar, mejor o peor, la mayor parte de las que nos propusimos buscar.
Aquí puedes descargar el listado (Excel o PDF) de las aves detectadas en esta ocasión. Nadie las vio todas, ni siquiera el guía, y hay un buen puñado que solo las observaron una o dos personas.