Búho nival: un ave y un símbolo
Duc blanc - Bubo scandiacus (Snowy Owl)

Tal como prometía en la introducción a esta sección, de cada cinco aves que suba, una será de las que no se ven nunca por Catalunya ni España. Abro así la ventana a la ornitología planetaria cuya riqueza nunca deja de anonadarme y qué mejor apertura que esta espectacular especie, símbolo aviar de los territorios más fríos del hemisferio norte.

El búho nival cría siempre dentro del círculo polar ártico aunque en invierno busca latitudes menos inhóspitas.

Su área de distribución abarca toda esa zona del planeta (el circulo polar ártico) tanto en Eurasia como en Norteamérica. En invierno vuela hacia el sur pero sin pasarse; Canadá, Suecia, Finlandia, Islandia y casi toda Rusia. Aun en invierno, en Europa es muy escaso. Debido a que cría en tierras que, durante al menos dos meses, no ven ponerse el sol, en verano se ha acostumbrado a vivir de día. El ejemplar de la foto es un machote; la hembra se distingue porque su plumaje blanco está barrado por finas barras oscuras. Aunque el búho nival también puede alimentarse de mamíferos, como liebres, y de aves (como lagópodos) depende, sobre todo, de la disponibilidad de lemmings (un género de topillos) y por ello aparece allí donde, durante el verano, estos roedores abundan. Pero los lemmings tienen años de gran proliferación local y otros de enorme escasez, así que siempre es incierto saber si habrá o no búho nival en determinada tundra. En su conjunto, es una especie nómada que solo permanece en un mismo sitio mientras dispone de alimento suficiente. El nido es una depresión en la cima de un montículo bajo, de manera que quede por encima del suelo que, en la tundra, la fusión de las nieves encharca.

En Europa crían muy pocas parejas (mitad norte de Noruega).

Por ello fuimos a la Alaska septentrional donde es más común. Allí, en el remoto poblado esquimal de Barrow, lo fuimos a buscar aunque no sabíamos si ese año, el 2008, sería bueno para los lemmings. Por eso nuestro alivio y alegría fueron mayúsculos cuando vimos que la apuesta había salido ganadora y conseguimos gozar de la visión de esta especie, una de esas experiencias místicas que resultan difíciles de transmitir a quien no esté chalado por las aves. Por eso, el búho nival se ríe de la cara que pusimos en su presencia.

Búho nival: un ave y un símbolo - ¡Conócelas! 5 – Grupo Local SEO Barcelona

Salvador Solé

Ornitólogo, fotógrafo, viajero y articulista. Socio de SEO/BirdLife desde 2002, colabora con el Grupo Local SEO Barcelona desde su fundación en 2010 y desde el mismo imparte cursos y charlas, también es guía de excursiones ornitológicas divulgativas.

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