Culebrera europea: el águila de marzo
Àguila marcenca – Circaetus gallicus (Short-toed Snake-eagle)

4 mayo 20192 mayo 2019 Salvador Solé conócelas

El género Circaetus es africano pero solo “nuestra” culebrera cría fuera de África; las otras cinco especies viven al sur del Sáhara. Aun así, cuando el verano se agota, la culebrera europea se marcha para pasar el invierno en una estrecha franja de países que va desde Senegal a Etiopía. En Pakistán, la India, Nepal y Bután es una rapaz residente. Con la primavera, llega a un amplio arco de países que va desde Portugal y Marruecos hasta Mongolia y el norte de China, ocupando también el SO de Rusia, pero evitando las islas británicas, Alemania, Países Bajos, Austria, Suiza, República Checa y Eslovaquia. No obstante, cría en el este de Polonia, Lituania, Letonia y Estonia. Se reproduce en todos los países mediterráneos excepto Argelia y Egipto. Escandinavia queda fuera de su área de distribución.

Salvo el impaciente de turno, los primeros ejemplares llegan a Catalunya en el mes de marzo y de ahí su bonito nombre catalán.

Dependiendo del año, en nuestro territorio se reproducen entre 400 y 800 parejas así que no es una rapaz difícil de ver y yo diría que, en general, es el águila que más frecuentemente se avista en Catalunya, entre mediados de marzo y finales de septiembre. Está bien distribuida en las cuatro provincias, aunque resulta bastante escasa en la franja litoral. La encontramos allí donde haya suficiente suministro de reptiles y una cobertura vegetal no tan densa que impida localizarlos desde el aire, así que tanto monta la montaña como el llano, las arboledas clareadas como el matorral e incluso semidesiertos y entornos de humedal. Eso sí; para nidificar necesita árboles, aunque sean bajos.

No es difícil de ver y en general es el águila que más frecuentemente se avista en Catalunya de mediados de marzo a finales de septiembre.

Yo la veo cada año en los recorridos por los secanos de Lleida, por ejemplo, desde Alfés a Castelldans. Igualmente está presente en geografías tan distintas como el Cap de Creus, el Vallés Oriental y la Vall d´Aran. Pero, puesto que los reptiles no abundan por sobre los 2000 metros, la culebrera europea tampoco. Y es que se ha especializado en capturar lagartos diversos y, sobre todo serpientes que, en el sur y el oeste de Europa, constituyen entre el 70 y el 80% de su dieta. Por razones obvias, prefiere especies que no sean venenosas, así que las víboras padecen menos su azote. Si puede elegir, escoge culebras que tengan entre uno y dos metros de longitud. Sin embargo, cuando escasean los reptiles (por ejemplo, cuando hace mal tiempo) puede cazar un poco de todo, desde conejos a anfibios, pasando por pollos de otras aves e individuos adultos enfermos o heridos. Si no queda más remedio, los insectos grandes y las escolopendras también sirven. Diríase que se ríe por igual del pescado y de la carroña. Para llevar las grandes serpientes a sus polluelos, las trocea antes de tragarlas. Aun así, de vez en cuando se ve volar algún ejemplar con la cola de la serpiente todavía asomando del pico. Por lo visto, lo de transportarlas con las garras no es su estilo ¡con lo bien que queda esa estampa en un escudo! Claro que cuando lucha con una culebra de las grandes – espectáculo que todavía no he conseguido presenciar – se pueden conseguir imágenes muy heráldicas.

De punta de pico a punta de cola mide entre 62 y 70 cm, con ejemplares que alcanzan los 188 cm de punta a punta de ala. Aunque las hembras tienden a pesar casi un 20% más, son solo marginalmente más grandes que los machos y presentan el mismo aspecto. Los ejemplares de las dos fotos que os muestro serían jóvenes ya que su plumaje (dorso, alas y cabeza) es clarito y también lo es la garganta.

Si bien parece que, en Catalunya, su tendencia poblacional resulta positiva, sigue estando considerada como “casi amenazada” ya que múltiples factores atentan contra su supervivencia; envenenamiento, puestas desbaratadas por molestias humanas, el exceso de grandes incendios, la intensificación agrícola que arrasa con sus presas… De todo ello cabría destacar la electrocución ya que es una rapaz que hace mucho uso de las torres de alta tensión como atalaya.