Roquero solitario: adicto a los peñascos
Merla blava - Monticola solitarius (Blue Rock-thrush)
El género Monticola comprende catorce especies de roqueros, similares al rojo (Merla roquera); los machos presentan pecho y vientre con tonos entre el rojo teja y el naranja pálido. El del roquero solitario es el único macho de Monticola que viste completamente de azul. Las hembras, esquivas y difíciles de ver, tienen píleo, nuca, espalda, alas y cola gris-azuladas. Y cara, garganta, pecho y vientre barrado de blanco y pardoscuro. De punta de pico a punta de cola miden entre 20 y 23 cm y, en efecto, estamos hablando de un pariente de los mirlos y zorzales pues pertenece a la amplia familia Turdidae (176 especies).
El roquero solitario es un adicto a los peñascos y todo aquello que se les parezca, edificios y presas incluidas. A veces habita laderas con bloques de mediano tamaño y matorral que no cuelan por precipicios.
Ruinas, cabos marinos, islotes, barrancos… una gran variedad de lugares minerales, con o sin vegetación, con poca o mucha pendiente, desde la altitud cero hasta los 4.200 m.s.n.m. en el Himalaya. Cuando emigra o se instala en sus cuarteles de invierno, puede aparecer en lugares tan “blandos”, como oasis, olivares y jardines. En Europa, desde Portugal a Grecia, es residente. Pero de Turquía hacia el este se alternan las zonas donde vive todo el año con grandes áreas de la Eurasia templada y tropical donde es estival o invernante.
El ICO calculó (año 2002) una población catalana de entre 8.000 y 13.000 individuos adultos. Cerca de Barcelona lo tenemos en el Garraf y puntos de la serralada litoral, pero donde está más extendido y resulta común es en el centro de Tarragona (salvo las zonas litorales). También aparece bastante en el prepirineo leridano, Montserrat, el Cap de Creus, Llançà, Colera y Portbou. Pero, de forma puntual, nos lo podemos topar en buena parte de Catalunya por debajo de los 1.650 m de altitud. En l´Osona y el interior de Girona está prácticamente ausente mientras que en las comarcas del sur de Lleida es bastante escaso y localizado.
Gracias a que sus ecosistemas son poco aprovechables para el ser humano, se libra de lo peor de nuestra influencia. Aunque hay infraestructuras que lo perjudican, igualmente aprovecha otras como las canteras en desuso, pueblos abandonados, urbanizaciones inacabadas, edificios agrícolas, etc…
La dieta del roquero solitario es amplia pues abarca infinidad de invertebrados y pequeños vertebrados, desde grillos a pequeñas serpientes pasando por lombrices, hormigas, ranas e incluso ratones. Además, sobre todo en invierno, aprovecha también fruta, bayas y semillas. Puesto que su área de distribución mundial es amplia, se alimenta en función de los recursos localmente disponibles según el entorno y las estaciones del año. Vamos, que puesto a la mesa, se ríe de las manías.
Ya he dado pistas de las partes del mundo que habita, pero me gusta ser más específico por si a alguien le interesa esta vertiente del asunto. Así que diré que, en Europa, es un ave sedentaria presente solo en los países del entorno mediterráneo y en Portugal. También es residente en Marruecos, puntos de Argelia y de Túnez. Hacia oriente se extiende hasta Japón, las islas Kuriles y Sajalín. El África sahariana (como muy al sur llega a Senegal y el norte de Etiopía) es para él zona de invernada, igual que la península arábiga y desde allí, a través de los países del Asia tropical hasta Filipinas. De nuevo lo hallamos como residente en el sur y SE de China y en Malasia pero es estival en el NE y en las dos Coreas. También es estival en oriente medio. Por el sur, y solo en invierno, abarca la mayor parte de Indonesia y alcanza las islas de Timor y Molucas.
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