Escribano cerillo: llamear en los arbustos
Verderola – Emberiza citrinella (Yellowhammer)

Poéticamente podríamos decir que el macho del escribano cerillo en plumaje nupcial, visto de frente y de lejos, parece la llamita de un fósforo sobre la punta de un pino o un arbusto. Entonces se ríe de la discreción, visual y sonora.

Es el escribano más abundante de Europa (entre 24 y 130 millones de parejas), pero en la península ibérica solo lo encontramos en el norte; como muy al sur cría en NO de Zamora y el norte de Soria. En invierno hace cortas migraciones meridionales, aventurándose hasta el centro de la península.

En Catalunya y Aragón cría en los Pirineos y pre-pirineos, llegando a los 2.000 metros, pero es muy escaso en los Pirineos más orientales (Garrotxa y Alt Empordà).

Si miramos el mundo, lo encontramos como especie residente desde Galicia e Irlanda hasta el cuadrante NO de Mongolia. En verano, para criar, se adentra en el sur de Siberia y, en invierno, hay poblaciones que se desplazan hasta países mediterráneos como Grecia, Turquía e Israel. También en invierno, hacia el este, lo hallamos en el sur de Kazajstán, Uzbequistán, Irán, Armenia…

Es una especie propia de espacios abiertos con matorral y/o con árboles dispersos. Durante los meses fríos, también es muy aficionada a los terrenos agrícolas. En el año 2002 el ICO estimó que, en Catalunya, como mucho, se reproducen 14.000 parejas. Parece que su presencia ha disminuido en el extremo SE de su distribución catalana, aunque en el resto se mantiene estable.

Entre noviembre y marzo recibimos visitantes del centro de Europa y el ICO estima que, entonces, en Catalunya puede haber entre 33.000 y 286.000 ejemplares, dependiendo de cómo venga el invierno (datos del 2009). A menudo nomadea por los barbechos mezclado en bandos con otros escribanos y fringílidos.

En temporada invernal sigue siendo raro o muy escaso en las comarcas litorales catalanas, pero común en el interior (excepto en la mitad sur de Tarragona).

De punta de pico a punta de cola mide entre 16 y 16,5 cm. El plumaje del macho (foto de abajo) es una versión de tonos más amarillos y contrastados – sobre todo en el patrón facial – del plumaje de la hembra (foto de cabecera). Pero, en plumaje de eclipse, el macho llega a ser casi idéntico a ella.

Se nutre de semillas diversas, aunque en primavera y verano también tira de invertebrados, que es el alimento que consumen preferentemente sus pollos.

Cada año, entre mayo y agosto, busco esta especie en las pendientes arbustivas que hay al NE de Les Ares, a medio subir el Port de la Bonaigua. Es el mejor sitio que conozco para verlo, pero dudo mucho que sea el mejor que existe en Catalunya, ya que no siempre lo encuentro. Seguro que en invierno hay lugares donde resulta más abundante y fácil de observar.

Escribano cerillo: llamear en los arbustos – ¡Conócelas! 161 – Grupo Local SEO BARCELONA
Macho de escribano cerillo, Araós-Bonaigua mayo 2015

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Salvador Solé

Ornitólogo, fotógrafo, viajero y articulista. Socio de SEO/BirdLife desde 2002, colabora con el Grupo Local SEO Barcelona desde su fundación en 2010 y desde el mismo imparte cursos y charlas, también es guía de excursiones ornitológicas divulgativas.

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