Vireón cejirrufo: carnicero en potencia
Vireó botxí diademat - Cyclarhis gujanensis (Rufous-browed Peppershrike)
Primer vireo que muestro en “Conócelas”. La familia Vireonidae consta de 61 especies distribuidas en 8 géneros que abarcan las Américas y el sureste asiático. Ningún representante en África, Europa ni Australia.
El vireón cejirrufo está presente, y sedentario, desde el este de México hasta Uruguay y el norte de Argentina, sin saltarse ningún país. No llega a ser abundante en ningún sitio, pero es común en muchos aunque no resulta fácil de ver porque se pasa la vida entre las hojas de los árboles. Desde el nivel del mar hasta los 2500 m.s.n.m., solo ocasionalmente más arriba, frecuenta bosques – sobre todo en sus límites con zonas abiertas – masas forestales ribereñas, manglares, cafetales e incluso algunos jardines.
De punta de pico a punta de cola mide entre 14 y 16 cm. Machos y hembras tienen el mismo aspecto. Se le reconocen nada menos que 21 subespecies que varían en cuanto a la extensión de la ceja y el amarillo en las partes delanteras. El ejemplar de la foto de cabecera, con el píleo (capirote) del mismo color que la ceja – sin ceja, vamos – pertenece a una de las dos subespecies del norte de Perú, mientras que al de la foto de abajo, con ceja corta y píleo pardo, hay que adjudicarlo a alguna subespecie del sur de Brasil.
Aunque come bayas y fruta con cierta regularidad, tira más de artrópodos: escarabajos, arañas, cigarras… De tarde en tarde se atreve con pequeños vertebrados y constan como presas suyas ranas, lagartijas, pequeñas serpientes, murciélagos, huevos, pollos y adultos de paseriformes. A pesar de ser poco mayor que un carbonero común (mallerenga carbonera), ese pico de alcaudón ya delata su capacidad carnicera. Al igual que las rapaces, sujeta a las presas con las patas para irlas despiezando a picotazos.
Su nido es una copa hecha de hierbas, musgos y fibras vegetales con paredes tan delgadas que a veces se ven los huevos desde abajo: más una red semiesférica que un nido. Lo construye en los árboles, normalmente bastante arriba. Faltan datos sobre quien incuba pero ambos conyugues alimentan a los pollos. Está clasificado por la IUCN como “no amenazado”.